Con el post del otro día tuve pelotera así que prometo no volver a dar opiniones sobre músicos patrios, no vaya a ser que se me enfaden ustedes otra vez.
Siempre tuve muchos prejuicios con la música hecha en español hasta que hace poco se me pasaron todos de golpe. Ahora tengo prejuicios con los grupos españoles que cantan en inglés y eso que tengo muchos amigos que lo hacen y mira que me gustan, pero aun así no hay manera de que me entre del todo. Se conoce que siempre tengo que tener un lado talibán en mis gustos musicales. Lo del prejuicio con el idioma no es porque me guste más el román paladín que el sánscrito, es porque considero que la única manera sincera de expresarse es hacerlo en tu propio idioma. Por mucho que farden, no hay tantos bilingües en este país, y eso que yo tuve la suerte de aprender inglés bastante bien, de hecho conocí antes Toledo (Ohio) que Toledo (La Mancha), pero aun así ahora escucho los discos de Underwater Tea Party con mis letras flipantes (eso pensaba yo) y me escucho con un acento catalán que se te va la flapa, me oigo cantar en inglés y me suena ridículo.Mira que me lo dijeron muchísimas veces, amigos y enemigos, periodistas y plumillas, hijos del mal de esta, nuestra tierra, e incluso así tardé la vida en decidirme. De hecho las primeras canciones de los MUCHO están compuestas en inglés, “Los hijos del mal” por ejemplo fue engendrada en inglés, se llamaba “You’re a Bad Seed” (de mala semilla como Nick Cave, pasamos a Hijo del Mal que tiene más onda). Ahora intentamos cantar en castellano pero tocar en güiri, you know what i mean.
Nuestra primera crisis como grupo fue por el idioma, incluso Fausto dijo que dejaba el grupo si no cantábamos en español. Al final todo es culpa de Fausto, el muy cabrón, mira la que me ha liado. Yo ahí tan contento cantando “Bending the miles” y de repente tengo que ponerme a escribir prosa grecolatina, copón! Y ahora viene la siguiente, porque claro, el primer disco lo solventas como buenamente puedes, pues venga, te haces unas letras bien majas, que sean así, musicales, sobre todo que te permitan cantar la melodía que has hecho sin problemas de consonantes ni acentos mal puestos y listo. Pero ahora, ja!, ahora viene el segundo disco, amigos, y ahora viene la gracia, ahora es cuando.
Viendo la que está cayendo las nuevas canciones están tomando un aire un poco apocalíptico. Todavía es muy pronto para aventurarnos a saber cómo serán realmente pero esta claro que el contexto actual ha hecho mella en mí.Me gustaría que las canciones tuvieran un hilo conductor, que hablaran sobre la situación actual en el mundo. Esta época tan rara que estamos viviendo, lo llaman “la Crisis”, pero en realidad estamos viviendo el fin de la época del petróleo. Nuestra sociedad basada en el petróleo se va a la mierda porque se nos va a acabar dentro de muy poco, lo tenemos muy crudo (y no precisamente el barril). Quiero que las nuevas canciones hablen de todo eso, no de una manera quejumbrosa ni para dar lecciones a nadie, simplemente porque me apetece hacer canciones de mi tiempo. Lo que no quiero es hacer canción protesta, obviamente estoy hasta los cojones de todo esto, como todos supongo, pero no quiero hacer de Woody Guthrie sobre todo porque no sería capaz de hacer algo tan bueno, simplemente me gustaría hacer algo conceptual sobre el fin del mundo, el fin de nuestro mundo, el fin de la era del petróleo. Aunque con estas cosas ya se sabe, puede que dentro de un mes lo que me llame la atención sea el cambio de los movimientos migratorios de la paloma torcaz, así que ya veremos en qué acaba toda esta exaltación apocalíptica.
Y ahora pensaréis, este tío está loco, se van a dar la hostia, los grupos en este país no hablan de estas cosas, a la gente le gusta que hablen de chicas y de borracheras. Bueno, pues nosotros somos los freaks que lo vamos a hacer. Para hablar de nuestras borracheras ya está el Twitter.
Si queréis profundizar en el tema os recomiendo este documental. Los links también son cortesía de Fausto.
Id por la sombra!
Martí